Preocupación existe en el gremio por la tenencia de un ejemplar de zorro culpeo en manos de particulares en la Región de O’Higgins y la entrada de partes de un elefante africano para uso ornamental.
En el marco de las denuncias de los últimos días asociadas a fauna silvestre protegida en nuestro país, el Colegio Médico Veterinario de Chile (Colmevet) mostró su preocupación por los hechos e hizo un llamado a la ciudadanía a proteger, denunciar y acatar las normativas vigentes que resguardan a dichos animales. Esto, tras la incautación de un ejemplar de zorro culpeo en manos de particulares en la Región de O’Higgins, para uso como señuelo en la caza de otros ejemplares, y la entrada de partes de un elefante africano como ornamenta, situaciones que están siendo investigadas por la autoridad competente.
“Como Colmevet somos enfáticos para que las personas cumplan las normativas y leyes que afectan a los diversos animales, tanto domésticos cómo silvestre, comprendiendo que desde el enfoque de Una Salud, también se ve afectada la salud humana y ambiental”, indicó Diego Peñaloza, vicepresidente nacional del Colegio Médico Veterinario de Chile.
Al respecto, agregó que “rechazamos el incumplimiento de la Ley CITES, que regula el tráfico de especies entre los países, como en el caso del elefante africano, animal en categoría de conservación, así como la violación a la Ley de Caza para la situación del zorro, la cual protege a los animales nativos. Según nuestro conocimiento, este último ejemplar además de la tenencia ilegal presenta severos signos que podrían constituir el delito de maltrato animal, por lo que se encuentra en un recinto para su rehabilitación”.
Desde el gremio, recordaron que si bien la caza en Chile está permitida y la tenencia de ciertos animales también. Esto está estrictamente regulado y fiscalizado por el Servicio Agrícola Ganadero (SAG) y Sernapesca dependiendo de la especie. Las autorizaciones para la mantención de animales bajo el cuidado humano, están establecidos con criterios claros por parte de dicha autoridad, dado que hay un gran número de especies que no se pueden cazar; lo mismo en el caso de animales que estén en CITES en cuanto a su movimiento entre países y su tenencia.
“El tráfico de animales es un grave problema mundial, donde existe maltrato animal. La ciudadanía tiene el deber de cumplir las leyes, además de denunciar y no promover el comercio o tenencia de animales o partes de ellos en los que se involucra un deterioro para las poblaciones silvestres y el bienestar animal”, puntualizó Peñaloza.
