El Liceo Técnico Profesional “Edwin Latorre Rivero”, que funciona al interior del centro IRC de Copiapó, con el anexo “Crisol”, les otorgó las licencias que acreditan que cumplieron con todos los requisitos para culminar esta la etapa escolar.
Un total de cinco jóvenes que permanecen cumpliendo sanción en el centro de Internación con Régimen Cerrado (IRC) de Copiapó, obtuvieron su licencia de enseñanza básica y media, otorgada por el Liceo Técnico Profesional «Edwin Latorre Rivero», el cual funciona al interior del recinto, con el anexo “Crisol”, para continuar la educación formal de los usuarios del IRC.
En la ceremonia de graduación, que estuvo cargada de emociones, reconocimiento y lágrimas de orgullo, tres alumnos egresaron de 4° medio, mientras que los otros dos egresaron de 8° básico. Los licenciados estuvieron acompañados de sus familias y del equipo del recinto. En el evento, que preparó el equipo del Centro de Justicia Juvenil y el Liceo, también estuvieron presentes la directora del Servicio de Reinserción Social Juvenil (SRJ) de Atacama, Carolina Cortés; el director del IP-IRC, Franco Castillo; el director del Liceo, Boris Vega; y el representante del sostenedor del Servicio Local de Educación (Slep) Atacama, Gerald Arrau, quienes brindaron palabras y mensajes motivadores y esperanzadores con miras a un futuro próspero y exitoso.
Carlos, uno de los jóvenes graduados, señaló que “se siente bien darle una alegría a la familia, en este contexto de encierro, y poder obtener esta herramienta que nos va a ayudar para toda la vida, el estudio”.
Asimismo, el director del liceo, Boris Vega, comentó que la visión institucional es formar personas para insertarse en la sociedad actual, a través de un currículo integral, enfocado en la certificación de competencias, habilidades académicas, laborales y de emprendimiento, con metodologías de aprendizaje activo participativas y una sólida formación para la reinserción académica, la microempresa y el emprendimiento.
Por su parte, la directora del SRJ Atacama, Carolina Cortés, felicitó a los alumnos y destacó el esfuerzo. “El primer paso para la reinserción social exitosa es contar con la confianza de quienes le rodean, pero, principalmente, es tener la autoconfianza necesaria para asegurar la posibilidad de alcanzar el sueño tener una vida y un destino distinto que los inste a caminar por el camino del éxito y la superación personal”, mencionó la directora, quien aprovechó de resaltar el trabajo de los equipos del anexo Crisol y del IRC, los que entregaron las herramientas para el crecimiento personal y académico de los egresados.
