El elefante marino ya casi terminó su proceso de muda de piel, por lo que podría irse la próxima semana.
El ejemplar de elefante marino (Mirounga leonina) llegó hace 18 días al sector de Bahía Inglesa a realizar un proceso natural de muda de pelaje, periodo que se puede extender por un mes aproximadamente, donde el animal permanece gran parte del tiempo fuera del agua, en una zona donde está altamente expuesto a la interacción con los habitantes y visitantes del lugar.
“No hay que olvidar que se trata de un animal salvaje y que está en su hábitat natural, por lo que no debe ser molestado, tanto por seguridad del animal como de las personas, pues puede reaccionar de una forma violenta si se siente amenazado”, indicó al respecto Claudio Ramírez, Encargado de Pesquería de Sernapesca Atacama.
Para resguardar al animal, el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura con apoyo de la Municipalidad de Caldera y de la Armada, han establecido turnos de vigilancia las 24 horas del día y los 7 días de la semana, debido a la gran presencia de turistas que visitan la zona y la cercanía de las casas de veraneo donde se encuentra el ejemplar.
Si bien los residentes del lugar se han quejado por la presencia de este ejemplar que mide unos 4 metros de largo y pesa alrededor de 2 toneladas, el llamado es a que sean precavidos, no se expongan y tengan paciencia, pues se trata de una especie protegida en el país, por lo que si el elefante marino es amedrentado o lastimado, las personas se arriesgan a multas que van desde las 3 hasta las 300 UTM.
Desde el primer día personal de Sernapesca se ha encargado de cercar el lugar en la medida de lo posible y entregar información a los visitantes para que puedan colaborar en el cuidado de este ejemplar, sin embargo, el día martes Sernapesca interpuso una denuncia ante la Fiscalía local por la agresión sufrida de un guardia municipal por un residente que lo increpó por la presencia del animal.
Ante esta situación, Claudio Ramírez indicó que: “Este fin de semana tendremos una mesa de trabajo con el encargado y especialista de la Unidad de Conservación y Rescate Animal de Sernapesca para analizar el lugar y evaluar algunas medidas adicionales de manejo del ejemplar, de modo de poder asegurar el resguardo del animal y de las personas”.