CRISTINA BRAVO BASSI
Abogada- Copiapó
“Hónralo con tus riquezas,
con las primicias,
de todas tus cosechas”[i]
Chile de antaño se enfocó en generar estrategias de industrialización, con un objetivo dirigido principalmente al desarrollo de su primera fase de crecimiento y propia de un país en subdesarrollo. Es evidente que hemos ido avanzando, quizás no de la mejor forma, pero sí, dentro de lo que la voluntad política ha permitido. Si bien nuestro país se industrializó, hoy por hoy el objetivo de este gobierno tiene que ser, el de reactivar la economía, en lo posible, hacer de Chile un país más competitivo y pasar a una economía colaborativa, territorialmente equitativa, sustentable, y lo ideal, dejar de ser ese pequeño rincón de Sudamérica netamente extractivo.
Vemos que a nivel global la tecnología, la ciencia y la innovación son una realidad imperante, y nuestro país debe buscar esos aliados necesarios para avanzar en favor de estos últimos, del emprendimiento y el fomento de la producción, logrando aumentar las inversiones, por medio del fortalecimiento de los emprendedores e innovadores que son los pilares para lograr este dinamismo.
Nuestra Región de Atacama no puede quedar al margen, debe potenciarse y desarrollarse con una mirada intensa en la diversificación, Atacama necesita que sus autoridades fortalezcan el desarrollo territorial, productivo, y contribuyan en el fomento de un capital humano que permita efectivamente, visualizar las oportunidades concretas para invertir, emprender y levantar nuestra región.
Para ello, es menester que quienes nos dirigen generen esfuerzos encaminados a las mejoras en la gestión y en una debilidad que está a la vista; necesitamos educarnos en lo se refiere a la asociatividad y a la práctica de una economía sustentable y sostenible, tenemos potencial para las energías limpias, renovables, electromovilidad, tenemos un turismo que aún se ve tímido e irresoluto, a pesar de los grandes atractivos que posee, por ende el llamado es, a llevar a cabo políticas públicas que favorezcan estos ecosistemas, y por sobretodo, a las Pymes emergentes.
Tenemos un sinnúmero de recursos naturales y una biodiversidad envidiable, motivo por el cual perfectamente podemos tomar esas ventajas competitivas, realzarlas, y reforzar los distintos sectores económicos que sin lugar a dudas, pueden hacer de Atacama una región potente, y como dije anteriormente, la clave está en la diversificación; no sólo somos mineros, somos una región rica, variada, atractiva, y con gente inteligente, el día en que tomemos conciencia de aquello, nos daremos cuenta que, somos ese vergel junto al desierto, digno de admirar, y que pese a todas las dificultades, somos fuertes, capaces de levantarnos con convicción y perseverancia frente a la crisis y a la adversidad.
[i] Proverbio 3:9