Marcela Cepeda González
Seremi de Bienes Nacionales Atacama
El ex vicepresidente de los Estados Unidos, Al Gore, elogió la política energética de nuestro país y específicamente el incremento de los proyectos de energía solar. Esto, en medio de una entrevista otorgada por el activista ecológico al periódico New Herald de Miami, como parte de la promoción de su documental “Una secuela incómoda: la verdad al poder”, la cual a diez años del estreno de su primera cinta insiste y profundiza respecto de la situación crítica que enfrenta el planeta ante el fenómeno del calentamiento global.
Gore señaló: “Chile está inspirando al mundo con una expansión significativa de la energía solar, más rápido que cualquier otro país en el planeta”. De hecho, en el filme se dedican algunos minutos al “ejemplo chileno”.
En la región de Atacama, el auge de los proyectos fotovoltaicos se ha concentrado especialmente en este gobierno, durante el cual la Secretaría Regional Ministerial de Bienes Nacionales ha otorgado mediante concesiones onerosas más de 5980 hectáreas a proyectos que han generado miles de puestos de empleo en sus etapas de construcción, atrayendo inversión extranjera y fomentando mediante la administración del territorio fiscal un cambio sustancial de la matriz energética.
La llegada de este tipo de proyectos en terrenos que son propiedad del Estado, a su vez, ha generado ingresos para el Fondo Nacional de Desarrollo Regional de Atacama. Sólo entre enero de 2014 y diciembre de 2016, por un total de más de $1.873 millones de pesos, destinados a programas sociales e infraestructura pública, cumpliendo con la meta encomendada por nuestra Presidenta Michelle Bachelet de administrar el territorio para un desarrollo sustentable, y de paso, convirtiéndonos en ejemplo para otros países.
Esta forma de enfrentar el cambio climático se complementa con otras medidas que siguen en esa línea, como la incorporación de la temática en los programas curriculares, anunciado a fines de julio por la Presidenta y que formará conciencia en las próximas generaciones, para seguir en la senda del cuidado del medio ambiente.
Cuando un ícono de la defensa del planeta nos señala como ejemplo a seguir y los ojos del mundo se vuelcan para ver lo que estamos haciendo como país, es cuando nos convencemos más aún que estamos haciendo bien las cosas y nos renueva de energía para seguir en esa senda.