Un innovador protocolo de parto vaginal inducido, se está implementando en el Hospital Regional de Copiapó, el cual contribuirá a disminuir las tasas de cesáreas, siendo uno de los objetivos del Servicio de Ginecología y Obstetricia de acuerdo a lo señalado por su nueva jefatura, Dr. Luis Javier Fuentealba.
El médico especialista expresó que esta nueva técnica incorporada en el Hospital Regional, busca disminuir la tasa de cesárea en un segmento de la población que es muy importante, “La intención de guiar a las pacientes a un parto vaginal es disminuir los riesgos asociados a una intervención quirúrgica, como lo es una cesárea. Y poder dar la oportunidad a estas mujeres de volver a tener en un futuro embarazo un nuevo parto vaginal, ya que no tendría una doble cicatriz de cesárea” argumentó el Dr. Dr. Luis Javier Fuentealba.
Los protocolos del principal recinto asistencial de la región indican que una paciente con una cicatriz de cesárea anterior podría tener un parto vaginal, pero una paciente con doble cicatriz de embarazo anterior y por el riesgo de rotura uterina, tiene indicación de una cesárea.
El Encargado del Programa de Salud de la Mujer en Atacama y médico del Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital Regional, Dr. Felipe Osorio Espinoza explica esta técnica de parto. “En pacientes con antecedente de cesárea, se instala balón de cook que queda en cuello del útero y se mantiene durante 24 hrs., luego se evalúa a la paciente, si hay cambios cervicales o sea algún grado de dilatación, se sigue protocolo con inducción farmacológica. Posteriormente se realiza una conducción del trabajo de parto, tras retirar el balón, después de estas primeras 24 horas, ese es el segundo día de inducción en que según cómo evolucione, puede terminar en un parto vaginal”.
De acuerdo a los facultativos, esta técnica ya es utilizada en hospitales de nuestro país, especialmente en Santiago, y a contar de este año se comenzó a implementar en el principal recinto asistencial de nuestra región, hasta la fecha tres mujeres han accedido a esta técnica de parto en el Hospital Regional de Copiapó.
Julie Cazanga es una paciente que accedió a esta técnica de parto vaginal inducido, quien comentó que entre una cesárea y un parto normal vaginal las diferencias se sienten, “En mi primer parto por cesárea mi recuperación fue mucho más lenta y este fue rápida. Además el apego es distinto, ya que al momento de dar a luz, se tiene al hijo junto a una inmediatamente; en cambio en la cesárea son horas después de la cirugía que puede estar una son su hijo. Yo recomendaría esta técnica a las madres que han tenido una cesárea”, misma recomendación que hace otra beneficiaria de la técnica, Limbania Silva, “en lo personal fue una experiencia bonita, lo recomiendo a todas las mujeres que quieran sentir un parto natural “
La implementación de esta técnica mecánica con balón de cook al parto vaginal, también tiene una influencia postparto. De acuerdo a lo explicado por el Director del Hospital de Copiapó, Dr. Mario Sotomayor Carrillo, “si bien es cierto que hoy existen programas de apego, donde incluso se incorpora al padre al parto, en el caso de una cesárea, la recuperación inmediata y la motorización de la mujer limitan en cierta medida ese apego, pues todavía está siendo sometida a una cirugía. Caso contrario a lo que acontece en un parto vaginal, en que inmediatamente hay un apego, que es más largo y más incorporativo con el padre presente, que lo que se puede hacer de apego en una cesárea”.