Ucrania: cadáveres esparcidos en las calles y fosas comunes quedaron a la vista luego de la retirada de las tropas  rusas de Bucha , un suburbio de Kiev. VIDEO

La verdad es que una inesperadamente feroz y bien organizada resistencia ucraniana los detuvo en las afueras de la capital, y la evidencia de esto incluye los restos oxidados y torcidos de la columna que todavía yace donde fue destruida en esa calle suburbana.

Tras dos o tres semanas de guerra, los invasores rusos se quedaron sin impulso. En las calles de Bucha se puede ver.

Las tropas élite de las fuerzas aerotransportadas de Rusia entraron en el pueblo en vehículos blindados, suficientemente ligeros para ser trasladados en avión.

Llegaron desde el aeropuerto de Hostomel, a unos pocos kilómetros de distancia, que fue atacado y tomado por paracaidistas rusos que descendieron de helicópteros el primer día de la invasión.

Entonces, la fuerzas ucranianas pusieron una resistencia feroz. Cuando la columna se desplazó por Bucha camino a Kiev, tuvieron un duro despertar.

La carretera es estrecha y recta, el lugar ideal para una emboscada. Los testigos dicen que los ucranianos atacaron el convoy con drones Bayractar que le compraron a Turquía. Otros lugareños indicaron que los voluntarios de la defensa territorial de Ucrania también se encontraban en la zona.

De cualquier manera que lo hubieran logrado, los vehículos de vanguardia y retaguardia fueron destruidos, atrapando a los de en medio. Los escombros no han sido tocados. Cinturones de munición con proyectiles de 30 mm yacen en los linderos de césped, con muchas piezas abandonadas de artillería peligrosa y dañada.

Los jóvenes reclutas salieron corriendo, rogando que no los entregaran a la defensa territorial ucraniana, dijeron los lugareños.

Un hombre de unos 70 años, que dijo llamarse Hrysta, expresó: «Me dieron lástima. Eran tan jóvenes, entre 18 y 20 años, con todas sus vidas por delante».

Cadáveres en la calle

Parece como si los rusos, a medida que preparaban el retiro de Bucha, no tuvieron la misma compasión. Había por lo menos 20 hombres muertos en la calle cuando las tropas ucranianas entraron en el pueblo.

El alcalde dijo que enterraron a 280 personas en fosas comunes.

Los pocos civiles que permanecieron dijeron haber intentado evitar cruzarse con los rusos. Encendieron hogueras frente a sus edificios de la era de Khrushchev, para cocinar al aire libre porque habían cortado el gas, la electricidad y el agua.

Los voluntarios están trayendo suministros de Leópolis en el occidente de Ucrania, y de países muy alejados de la guerra, al menos en términos geográficos.

«Este es el primer pan que he comido en 38 días», dijo una mujer llamada Maria, mirando una bolsa plástica con unos modestos panecillos adentro. Su hija Larysa me dio una gira del edificio residencial de la era soviética.

Muchas personas que se habían ido a lugares más seguros, o al exterior, habían trancado sus puertas de seguridad con cerrojos. Los rusos las abrieron arrancándolas de los linteles de concreto y las jambas.

Mundo en Conflicto 

Video:  pic.twitter.com/s216EHDaSV

Fuente: BBC

Fuente: Mundo en conflicto.

Fotografías Twitter

Síguenos en facebook

Comparte

Facebook
Twitter
WhatsApp
error: Contenido protegido!!!